Un artículo que escribí hace tiempo ya, cuando tenía 20 años…
El Sol sale todos los días. Decimos que todos los días sale el mismo sol y que la tierra gira al rededor de él. Pero si supiésemos mirar con la inocencia que miran los niños veríamos que el sol es otro. Porque cada nuevo día es una nueva oportunidad de mejorar, de crecer.
Otro Sol trae nuevos caminos, nuevas oportunidades. Nuevos rayos que jamás nos han llegado a iluminar, un nuevo calor, un nuevo fuego, un nuevo amanecer.
Si vemos el mismo sol, es porque vemos con los ojos de la mente inferior, si veríamos con los ojos del corazón veríamos un Sol totalmente distinto, totalmente nuevo. Nosotros mismos cambiamos de ayer a hoy, cambiamos a cada segundo. Nosotros mismos somos otros hoy.
Veríamos entonces que la tierra no gira alrededor del Sol, sino que baila, danza, celebra cada día, celebra eternamente, a temporalmente. Y esa danza es su Oración.
Solo lo que está muerto no cambia. La tierra danza, celebra, el Sol mismo se celebra, el Universo entero danza y celebra. Nada se mantiene estático. Mira cada átomo danzar, celebrar Orar en torno al Sol.
Y así también todo nuestro cuerpo está celebrando, de la misma manera que el universo. Se sabe que cada átomo danza de la misma manera que cada planeta lo hace. Si la vida danza, vivir es danzar, un eterno danzar y estar vivo quiere decir estar danzando. Y esta danza es una Oración.
Pero generalmente no estamos concientes de que todo esto está ocurriendo, prescindentemente de nosotros, ocurre por fuera y por dentro, constantemente.
La mente inferior nunca está en el ahora, es memoria y deseo. La naturaleza de la mente es la no-existencia, vive en lo que no está existiendo; la naturaleza del corazón es el ahora, el eterno ahora. Y el corazón no es ese pedazo de carne que tienes en tu pecho.
Meditar y Orar es ir más allá de la mente, entrar en conciencia de la constante celebración y oración del universo, entrar en contacto con esta dimensión, donde hay silencio de celebración. Entonces ese es un silencio extático no estático.